Páginas

Pasión no es palabra cualquiera


Esta tarde he asistido a la presentación del libro Pasión no es palabra cualquiera y, ya por fin, lo he comprado. Pasión no es palabra cualquiera es proyecto de Joserra Rodrigo (Exile SH Magazine, rockandrodri land) con ilustraciones de Cayetana Álvarez. Financiado a través de crowdfunding en Verkami, es un libro que recopila diferentes reseñas y relatos relacionados con canciones y discos que han marcado la vida de Joserra y, al igual que la de él, la de muchos otros.

Aún no he leído más que un par de relatos, así que no puedo decir mucho del libro. Sin embargo, puedo afirmar que lo mejor de los textos de Joserra es La Pasión con la que los escribe. Son textos capaces de desbordarse del papel o de la pantalla del ordenador para abrazarte y moverte. Esto es, nada menos, lo que le pido a las canciones. Y encontrar algo parecido en unos textos, que además llevan canciones fantásticas e inmortales de fondo, es una gozada.

Hace ya semanas que pienso por qué he vuelto a escribir en un blog. Hay una conferencia de Ted Talks en la que Simon Sinek (un tipo realmente interesante) contaba que para vender un producto o una idea lo que importa no es qué haces ni cómo lo haces, sino por qué lo haces. Ese mensaje, el por qué, es el que llega a las personas. No pretendo venderos nada, pero ese concepto, el por qué, me dejó fascinado. Sí, escribo sobre música con cierto estilo y formato, y puedo tener más o menos gracia haciéndolo pero lo que me mueve a hacerlo es lo más importante. Y he pensado mucho sobre ello.

Por una parte, mi propia realización personal. Ver que soy capaz de hacerlo, hacer algo que realmente me gusta, mejorar en ello y poder sentirme orgulloso cuando relea algo que yo mismo he creado. Tengo que confesar que me ha pasado. Hace poco que he retomado el asunto este de la escritura y, al releer textos antiguos -nada del otro mundo, pero algo al fin y al cabo-, he llegado a sorprenderme y sentirme satisfecho por apreciar mucho de lo que escribí hace unos años.

Por otro lado, lo hago porque me gusta compartir la música que me gusta. A veces, hablando con alguien sobre música -y sobre cine, libros o marcas de mortadela, qué sé yo- me emociono y quiero decir tantas cosas que me colapso. Quiero decir que tal disco o tal canción tienen un sonido tal o cual, que en cierto momento salta un acorde, o se electrifica, o una nota suspendida me erizó los pelos de la nuca en tal momento; son tantas cosas, que mi cabeza piensa más rápido que la lengua y ésta se tropieza. Escribiendo tengo la calma suficiente para intentar decir todo lo que quiero decir. También, compartiendo canciones y discos, he llegado a conocer personas maravillosas. Lo digo en serio: ahora mismo me vienen a la mente nombres que gracias a compartir y escuchar música con ellos y ellas (personalmente o a través del ancho de banda) se han hecho con un trocito de mi corazón.
Unos minutos antes de la presentación me ha llegado un vídeo al teléfono. Era mi sobrina de 9 meses dando sus pasos ayudándose de un móvil de madera con patas a modo de andador. Y, ahora, con todas las emociones a flor de piel, pienso que quiero escribir, en este blog o donde sea, por ella. Quiero compartir todas estas canciones, estos discos que amo, con ella. Hasta el día que le de tal chapa que me desplace, que ya no acepte mi música, se rebele y me haga capaz de amar lo que ella ame como yo amo ahora a los hermanos Robinson, a Gram Parsons o a George Harrison, por mencionar algunos.

Y de la misma manera que quiero compartir con ella, quiero compartir, amar y darle la chapa a todo aquél que tenga la mala pata de poner un pie por aquí. La única satisfacción que busco es que alguien me diga que ha escuchado y disfrutado un disco por mi culpa.

1 comentario:

  1. Genial!!! Fantastico!!! Podiamos decir que te has licenciado..., ahora cogiendo el concepto del para qué..., para cuando tu libro!!!
    Un abrazo

    ResponderEliminar